Las coplas nunca mueren, viven en la memoria del territorio

Don Joaquín Herrera como lo conocen en La Jagua,  centro poblado cercano a Garzón afectado por la represa  El Quimbo,  es un reconocido compositor de coplas, lleva 40 años viviendo en la zona y asegura que la represa es un desastre para los pobres, por eso su letras también muestran el dolor de ver como se desplazan sus vidas  de sus tierras.

Don Joaquín  por más 70 años ha habitado el poblado  de la Jagua, en su memoria queda el  anhelo de mantener  vivo su territorio y  sus letras son testigo  del pasado que se transforma por el desarrollo del presente.  Por eso sus versos que no escribe, salen de su mente y se quedan  ahí  están cargados del sentido que siente sobre su territorio, al Magdalena y por eso rechaza con dolor el desplazamiento en el Quimbo.

Vendieron al Magdalena
El emporio nacional
Y dicen que quería vender
la casa presidencial

Y todavía decía Uribe
Aquí no ha pasado nada
Voy a vender todo el río
Con vertientes y quebradas

Si siguen esos negocios
Lo digo de corazón
Terminaremos los pobres
Esclavos de otra nación

Es al todo poderoso
Que tenemos que clamar
Que nos mande a otro bolívar
que nos venga a libertar
Porque  el presidente Uribe
Ahora nos volvió a entregar

Es la represa de El Quimbo
La empresa que  menos quiero
Porque acaba con empresarios, Caocaoteros  y arroceros
Y nos deja sin trabajo a miles de jornaleros

Me quitaron mi finquita
Donde mi familia crie y
No sé si me la paguen
Eso si que no lo sé